Fuente: lavozdegalicia.es
La asociación organizadora valoró positivamente esta edición de la feria.
El Pazo de Feiras de Lugo sirvió como escenario de la nueva edición de la feria gastronómica L de Lugo. El evento echó este lunes el cierre en una nueva jornada multitudinaria, en la que cientos de lucenses se dieron cita en la celebración para degustar productos nacionales y foráneos.
Se trató de un gran escaparate culinario, con distintas salas, donde se podían degustar de manera libre, tras adquirir una pulsera en la entrada, todo tipo de vinos, fiambres, carnes o aperitivos de calidad.
La segunda feria de los distribuidores lucenses conquistó en su primera jornada al público más selecto gracias a los llamados «cooking shows» en directo, que permitieron probar y además aprender de los grandes expertos en esto de la cocina moderna. En la segunda, la de ayer, los protagonistas fueron los maridajes de varios de los productos más selectos de Lugo y A Mariña.
«Hoxe estamos cumprindo as expectativas que tiñamos», explicaba el lunes Eloy Cristo, organizador del evento, «porque onte superámolas por moito», añadió. El responsable de la actividad explicó que, el domingo, más de 3.000 personas se pasaron por el Pazo de Feiras, siendo unas 2.000 ayer lunes.
«Houbo ata problemas de aforo. Estamos contentos, pero danos pena porque houbo xente que quedou sen atender pola cantidade de visitantes que tivemos», afirmó Cristo.
Según él, las partes más populares de la jornada fueron las catas de vino, maridadas con otros productos. Pero destaca, por encima de todas, la cata de whisky escocés Macallan, uno de los más exclusivos del mundo. «En Lugo nunca se fixo algo parecido. Á xente encantoulle e nós quedamos moi contentos de poder ofrecela tamén», concluyó el organizador. De esta forma, terminó la nueva edición de la feria L de Lugo, que promete regresar el año que viene de nuevo.